
Las ventajas del renting de vehículos: ahorro, control y tranquilidad.
Estas son las principales ventajas del renting de vehículos, y los beneficios de disponer de un servicio de movilidad con la máxima calidad.
+ Ahorro: las economías de escala de comprar y gestionar una gran cantidad de vehículos son transferidas al cliente, generando un ahorro frente a cualquier otro sistema. Además, la renovación periódica de los vehículos genera un ahorro de combustible como consecuencia de la incorporación de vehículos más eficientes.
+ Control: la gestión integral de la flota por parte de un solo proveedor, la transparencia aportada en la información de la flota y las herramientas de gestión, facilitan un control máximo. Este control permite además realizar una mejor previsión del gasto en los presupuestos.
+ Tranquilidad: las coberturas de los servicios, la proactividad en la gestión de la flota y la variedad de soluciones ofrecidas, hacen que el cliente pueda externalizar totalmente la intensa gestión de la flota de vehículos en un especialista. Además, a través del renting, el cliente transfiere el riesgo de obsolescencia, averías e imprevistos del vehículo a la compañía de renting.
+ Tiempo: la gestión de todos los trámites y gestiones relacionados con la flota, permite al cliente poder dedicar más tiempo a su negocio.
+ Imagen: la renovación de los vehículos de forma periódica, mejora la motivación de los empleados, la imagen del cliente frente a terceros, y además contribuye al cuidado del medio ambiente al emitir menos CO2.
+ Liquidez: al tratarse de un alquiler no hay que hacer frente a toda la inversión o dar una entrada para comprar los vehículos.
+ Flexibilidad: al poder personalizar cada contrato de renting en función de las necesidades concretas de cada empresa. Movilidad a la medida.
+ Sencillez: al tener un único proveedor y una única factura para todos los servicios contratados y relacionados con la flota de vehículos de empresa.
+ Ventajas fiscales: la cuota mensual es deducible hasta un 100% en el Impuesto de Sociedades. El IVA correspondiente también es deducible en al menos un 50%, un porcentaje que se incrementa si se puede demostrar una mayor afección del vehículo a la actividad profesional.